sábado, 26 de agosto de 2017

SUTIL


Ella tan selva
uno tan poco explorador
o acaso, tan flor
y ésta, emoción, tampoco abeja
porque para mano abusiva
bastan mil réplicas
del mismo espejo en la otra cosa
en cambio, qué dulce
ala de manita contra pétalo de dorso
sólo llevándose el polen
para que vuelvas
aire tan pillo
y tan billete la platea
que rechina de brillos de aplausos
en ojos esquivos la tela
de araña pestaña la prisa
que llueve en miradas indiscretas.

Ve, redoble tamboril de pájaros
que si el nido se ha ido
en el racimo cortado, el celo
incubará el aguilucho
aprendiendo a volar entre la niebla.



No hay comentarios:

Publicar un comentario