lunes, 24 de julio de 2017

OTRO ADIOS PARA WISLAWA


¡Ábrete!
¡Más, pero qué despropósito!
No ves cómo te entiendo, cómo conoces mis rincones
dices huele a almizcle de león y sé que me lees
Digo, maldita, que no me escamotees el horizonte
Pero...si horizonte somos, y el papel sólo el soplo
de esta actualidad hablando con tus ojos, mis ojos
en el perro que alza la pata sobre tu sombra
descansando del peso de tu espalda en el siguiente árbol
y te mea, asintiendo, el pensamiento
no la amas igual que la llama ama al aire, muriendo
para que los dos vivan y mueran al tiempo
y va al siguiente hito y hace lo mismo sobre tu respeto
tu lengua siéndole infiel a la oscuridad de mi boca
con el aire límpido y le dices que no es lo mismo
cargar el Cristo que cargarle al clítoris
con el dedo de la verdad, no con el de la ilusión...

Si el no-de-𝛑 se deja caer en el pino y sus agujas
sobre lo nos-otros tejen el derrumbe
por qué no, por ejemplo, allí, al frente:
El número esculpe su leche de mármol, Trivento
marca registrada de tu futuro apartamento
dónde estará el viento número cuatro
¿dando de mamar al circo?
pero¡qué cosas! si en cada rincón de la vida hay uno
Ella, allá, en el único hueco con arena casada con el fuego
que sopló e hizo botellas hablando en el nuevo idioma
con su novia
y la avispa empieza a hacer negocios con la malicia
ella, quizá te espera para sellar el contrato
con sus gafas negras de Black men o, acaso de Neo
neo-embeleco, tú sabrás:
si en adelante quieres el último sentido a cada meada
y a cada bollo de caca su vocación de pan
el impulso a cada aliento que está por llegar
ve a abrazarte con la cerámica recién horneada
o acaso quieras ser ojo de fibra óptica y ponerte las alas
de los ángeles del enésimo cielo...


Wislawa, mucho me temo que aquí te dejo
y que no puedo aceptar tu pedido nupcial
no, no nos entendemos
la tuya no es mi verdad, la única posible
la mía está de aquí para allá, contra-diciendo
la tuya aquí y allá y acullá, desdoblándose
y desmultiplicándose
necesito mis huesos que hiciste ceniza
para llevarme a pasear con tus nubes
necesito mi espalda para que puedas chorrear tus orines
y el árbol pinte tu pentagrama y baile tus mazurkas...

Tú, más maldito tú, le vas gritando a mi cirio
que salta sobre la sombra de tu viento
y la deshace en procesión de luz por las cosas
que cantan tu nombre
apegado al respirar como un muchachito
no sabes lo que sabe el trébol de su condición
cuando es de cuatro hojas y está solo
esperando el par de dedos que lo arranquen...
No sabes...

Sí, sí sé; sé cuánto le cuentas al pixel de los colores
y sé cuando le lloras un poco de sed a las lágrimas
sé qué caminé cuando le di piedad a esa mariposa
en el último estertor y ahora es parte de la piel
de tu vivo catafalco, en la contratapa
de "Poesía no completa"
ahí pongo nuestro retrato