lunes, 26 de agosto de 2013

MODELAR EXTRAÑO

MODELAR EXTRAÑO
Colegiala que caminas como si la escuela fuese
una academia de modelos y no una guardería
de la brida de esta final escena universal.
Gastas la suela de tus zapatillas con una gracia tal
que el gasto no es diestro ni siniestro
y en el pathos de tus zapatos el centro hace orgías de mismidad.
Los cuadros de tu falda de colegiala filman en paneos
los abismos que van desde el pan al huesito de la alegría
pero la imagen nítida es tu inalcanzable centro de gravedad
y pese a que un poeta sobrepasa el guión ultramoderno
que te osa formular atavío de cultura de cochera
que en el peircing nariguera hace cosquillas a la comisura
de tu boca que no alcanza a voluptuosa vulgaridad
porque en el rouge de putita que en tu gesto hace cita
el alma pone un raro acento del que no sabemos
si es poco ensayo, poca catadura o definitiva castidad,
No cree este pobre esteta que el acero de la pesa
[que pendula en su prepucio
con esa argolla no se pudiera desposar.
¡Ah, qué hacemos!
-se dicen los gemelos pensamientos-
si ya bailaron los destellos de los ojos
su mazurka de odio con curiosidad?
huir porque el tintineo del leproso
que hace un código insobornable
es más fuerte que la policía del poetizar
que te pide papeles
y que respondas cuestionarios
escritos con imán.

RECONVENCION Y OTRAS

RECONVENCIÓN
Usted dispense, señorita
más debo informarle que el aire de este día
se siente terriblemente ofendido
de que usted esté actuando como su espejo.
Aprovecha usted, señorita
que hay nubes grises sobre el cielo,
sino los cuchillos del sol la denunciarían
que tiene carne moldeada sobre esos huesos
y no esa atmósfera fantasma
que vuelve ciegas las formas
y pone a los colores de las pasiones a pelearse
acerca del por qué no pueden
holgarse en su reflejo;
y entonces las discusiones
de las fuerzas vertiginosas que somos
y que no pueden seguir su camino
porque se quedan adheridas en su sortilegio,
hacen que mi voz se asombre
de quedar tatuada en una nueva memoria
que asume el rostro de un eco infame
donde se ofrece a la venta a todos
la música de la ignominia.
disculpe usted, señorita
pero es que la plástica
medianamente inocente
de la lycra que la lleva
no me deja guardarme a decirle
que nos ha herido la luz filosa
de su sexo.
***
LICORES
Es motto que tomo el mosto
danzarín gnomo en la cuerda
temblorosa de la sangre
poniendo a psique de expectante espectador.
¡Bah!, bermejo reflejo de burdel
-dice el vodka-
yo soy el destello del diamante
pulido en las altas cumbres
donde se calienta el frío
y el rey Misterio trabaja tranquilo
en el ordenador.
Pero yo soy quien te ordena el ritmo
-interviene el ron-
de mis dulces cañas de hojas cortantes
escancié la sangre
destilada en el brío del corcel
y ahora saco a la luz pegasos sin dioses
y Hércules inmortalizados
sin Tántalo ni azar.
***
SHAKESPEARE
Ay, la marcha de los siglos
avanzando solemne y misteriosa
en un ilustre impostor:
El conde de Oxford
que a un pobre bardo sin bártulos de actor
enjaezó con los más altos actos y los más trágicos
que pasión humana jamás pintó;
y que una distinguida envidia: El fraude
canónicamente en psicoanálisis legalizó.
***
VINO JOVEN
Ay, vino joven, mi joven vino
que ya viejo en mi intestino
se pregunta:
¿cuando iré a re-suscitar?
pues no hay vendimia en la billetera
y la levadura no espera, sola
en un tibio hogar.
***
LEJOS DE MI
Hoy estoy tan lejos de mi
que el aire que me entra como ají
[por las orejas
y el fruncido ceño
que la pestañas-cejas
quieren saber si están vivas
o ya están pululando las larvas
me dice: ¡Aprovecha!, mira
cómo te soplo al oído mis dulces marchas
y tú, ahí, impasible
escuchando la música de los muertos
que no terminan de enterrar a sus muertos
porque aún creen poder revivirlos
en sus obras.
Tú, que estás ahí
escuchándote que es cierto que
afuera tu no existes, sólo adentro”
pero esa verdad lo es
sólo cuando vas siendo
no cuando estás
porque eres como un río turbulento
extasiando una estrella.

CAMALEON

CAMALEÓN
Camaleón es, simplemente
un león de cama
que se ha agenciado una alta rama
y lanzar lengüetazos
por si alguna estrella en vacancia
quisiera pegarse a su gana
aquí no hay saliva,
sólo de sal una vía
donde la estrella viene a peinar
su soledad harta de reluctancias
en el espejo mágico
de las volubilidades humanas
-entonces la estrella
sale a relucir sus nuevos destellos
en una pasarela mortificada
de expectancias-
el camaleón sólo espera
a que los vahos de colores
que emanan los tréboles
los dulces aromas
del polen de las esperanzas
le prometan una alianza:
ellas ponen el cálid-os-copio
él, la farmacia
de remedios de sueño
fértiles en re-anudancias
de órbitas desmentidas
como que el eterno retorno
ya no es la vagancia
sino un asueto constante y sonante
en torno a un tema de fauna variada
periscopio de situaciones
tallas insospechadas de la cera
engastes sin base lógica
caídas dulces de la logia
de las fórmulas exactas
átomos inmensos cazando
en nimios impulsos
tenues destellos deslumbrados
vastas umbrías
álgebra de la agonía
haciendo el acápite
de las transmutaciones sin ansia ni miedo
y el medio igualando el éxtasis
en un basural de desgracias
enriquecidas de isótopos
del resistir, del rescatar,
del reciclar, del tamizar,
del ralentizar y, al fin,
del re-h-usar, re-a-nunciar
re-suscitar
cuando lo único que queda
es implotar.

ALTOS CONDUCTORES BORRACHOS


Altos conductores borrachos
que tenéis chófer que nunca entrega las llaves
es tu blindado carro el que nos atropella
andando al zoco del principio de razón suficiente
im-putando el instinto de rebaño:
que no es dócil: ¡lo es!
y es manso, y es noble
con una nobleza que no has degustado,
pero no es menso y se está angustiando
porque no sabes que el zoco
es el cadáver de la escoba que barre antaños
entonces ¿donde quedan tus principios de razón suficiente?
en el alcohol soberbio de un lenguaje domesticado
altos conductores borrachos
dejaos tomar la prueba de que no estáis tan sobrios
como la gallina del primer ba-l-bu-ce-ando