DEAR TODAY:
Tú sabes que la verdadera nobleza y aristocracia no se encuentra en las relaciones políticas, de clase y menos en las institucionales; la gentileza es obligación de toda persona. Sòlo es para contarte y decirte -y si acaso puedes montarte en el correo de las brujas, así al desgaire del estilo, punzón que punza pan-seta a nadie y a todos con y sin meta, por pudor propio y ajeno- que si acaso pudieras decirle a ese que siendo una persona ahora de editor juega, que en mi vida quiero saber de él o tener entrevistas pendejas. Que si quiere arreglar el asunto le diga al jefe que me consiga una pensión sustitutiva ya que para esquizofrénicos plaza y pereza, o también que me puede arreglar a lo cerdo que como institución ya sé mejores almas han enviado al infierno. Atte. EL YO QUE DESESPERA
