jueves, 9 de febrero de 2012

POETAS 2033

Gracias a las nuevas formas de marketing cultural de la aldea global, editores argentinos han dado en presentar –con el auspicio de la Universidad de Caldas- una nueva publicación* en éstas tierras de tránsito de los modernísimos modos de asumir el intercambio económico-político según los cuales las nuevas formas de vida tecnológicas
comportan zonas vivas y muertas de actividad dentro de las cuales unas son silvestres y otras domesticadas, pero dado que la nuestra es una nación tan sui generis que no se acomoda a ninguna categoría de las nuevas formas del caos, hemos denominado una nueva zona: Zonas de Tránsito que, tan ocupadas en mantener actualizado el flujo geo-político acorde a sus particulares formas de desarrollo, se convierten en sociaciones, nuevas formas de desorganización, de tipo hospicio en las que, a diferencia de los hoteles de cinco estrellas, pero con las mismas aspiraciones categóricas de ellos: rituales de relación de alta sofisticación, valor agregado de operaciones, máxima discreción y reputación de referentes, sólo que no tienen las camas impecables, las piscinas en las que nadan sus clientes no se garantiza que estén perfectamente odorizadas y hay que disfrutar del amplio buffet sin derecho a reparar en calidad o gusto; tal publicación se ha denominado “2017: Nueva Poesía Contemporánea” en la que se ha tomado una variadísima muestra de poetas nacidos entre 1970 y 1985 los cuales, publicando sus trabajos en los sitios habituales de la red (blogger, Word Press, etc.) son ahora objeto de un libro físico del cual lo novedoso no es su calidad (que puede tenerla; al menos la selección de nuestra fuente ha dejado buen sabor) sino quién auspicia a quién y qué auspicia qué y para qué. Para muestra un botón y de encima, la reacción.


POETA 2033
I
Aunque no tengo por cierto aún
como cuando tenía veinticinco
que ya no hay metas,
sólo camino
y, peor aún,
que cada paso es un azar indeciso
hasta que llegue el abismo
y que el salto cuántico
-que parece cierto-
me ilusiona
de obtener una membresía
de la Super Mario Bross. Inc. Factory
que no es un juego
sino un status de posicionamiento:
en qué sitio de la red y en qué red
me muevo;
en qué hilo chingo, cuál hostil,
cuál me brinda hospicio;
que movimiento de bolsa me desnuda
a cuántos worms les muestro huevos
de que estamos tan lejos como al principio,
es decir, cuando el pitecántropos
vislumbraba a Aristóteles
y parir una idea era asunto de esfuerzo y tiempo.
Pero de algo estoy seguro
y es que Platón estaba en lo cierto
cuando pensaba que hay un reino
inexpugnable y perfecto
que me hace vibrar el bichito
que tengo dentro
y me hace sentir como alguien
que habita otro mundo...
Perdón, ahora tengo que resolver
éste holograma
que pretende ocuparse de mi tiempo
me ofrece un orgasmo gratis
con tal que le haga sentir existiendo.





¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬¬* Fuente: Diario LA PATRIA de Manizales, Ed. Feb. 2 de 2012


II
¿Cómo sabe la sinápsis que el byte no tiene contenido de significación existencial?
¿No es ingenuo –acaso malicioso- pensar
que sólo porque es burro
no sabe que el oro lo vale sólo por cargar?
¿Si la metáfora del número pasó de ser látigo a ser caricia
por qué la coz del evento resuena a gemido maquinal?
¡Ah del agua sucia que sigue siendo agua!
¡cuántas familias se están diseñando
en la anaeróbica estupidez cerebral
de la bacteria gaso-fagót-i-ca!
-¡qué de aires y de músicas y de tiempos que el solfeo ignora!
¿¡Cuántos comandos facinerosos estamos creando
en cada tecleo erróneo, en cada decisión errática!?
¡Ah del dulce silencio que antes rodeaba las cosas!
ahora se llama ruido informático;
el nuevo buda: interfaz
el arca perdida: teoría mediática
taumaturgia bendita: la praxis
y asombro

III
Logi-ca-ído en un nodo con cara de ánodo
Ca(da)-to-do me ha traído a este signo atem-por-óntico
donde podría estar seguro de que me faltan cuatro
para cumplir setenta y cinco años;
he detenido el viaje en que partí
ha even-tu-al desde el destello de la gota en la red
de un dis-positivo arácnido
¡Ah de la ar-que-tu-ruta arquitectura de la araña
ahora partícula en este mond-(h)-ongo de metabolismos plácidos
de negligencias!
viéndome en la luz que me estás viendo
cada f-y-lamento sabe más o menos que el otro
y no le importa que su lejana parienta la lengua
tenga la llave del adentro y afuera
enredada en p-apilas
por creer que el sabor del ayer y del hoy
es el condimento...
...Ah, y nada sé ni sabe ni sabemos del pliegue
donde hinca el pie el callo y preña sucesos;
mucho menos de donde se forma grosura
que hace holocausto y agrada el aroma
que obnubila la differ-ance de categoría óntica
pues, efímera comunicación, ontológico estatus,
entre ca-loor, calor, y la fe en que echo el ego: el f-u-ego
se disipa temeroso de vasallaje...
...Así que me encontró el mensaje de tu deseo –acaso amoroso- de guiarme
en el sitio de choque donde dejé una tarde mi anhelo de encontrarte
entonces supe que no es el mismo hado que hace el el-hado
que aquel que con-cita porque yo invoco la ciencia
y tu temes al diablo.

CARLOS EDUARDO PÉREZ MEJÍA