miércoles, 16 de septiembre de 2015

POEMAS POR EL ADIOS II


Le gustabas porque eras mala
es decir, buena
pues una persona mala
es a la que hala m(i)-ala
arnes del misterio
aunque las mascaras no tienen alas, vuelan
en cambio, los buenos
a-nube andan
buscando horizonte y suelo
a lo que Anubis, dios sutil accede
los envuelve en su niebla y les niega
la-otra-alba del albatros
que sabe usar la fuerza
que flota divagando por el universo
esperando ser poseída por sus favoritos
mientras el reino del sueño, ese balanceador
se acoge a secretos oficios
que hablan de horizontes
menos atenidos al miedo y al orden
al fin, el sueño tiene todas las manos...
Le gustabas porque no te ocupabas
de procurarte la pez grasienta y cementa
que embarduna la fachada de las "reinas"
en cambio dejabas que el cristal de roca
con el hollín sonámbulo que deambulaba
te hiciera de persianas y la luz
que no se pretendía pura y limpia
dejaba entrar los desechos valiosos
desperdicios de ciegos exhostos
de industrias desaforadas
como trasladar la muerte a la efigie de un billete
blanqueado del tercer ojo por suspicacias sin método
y era allí donde se desconcertaba la encrucijada
porque ciertas semillas que caían del cielo
esa copa repleta de frutos del desperdicio
daba sus cosecha sin ton ni son -tanta sublimación-
éteres, jabones, carne sobrante del festín sofisticado
perfumes, alcoholes, radios y argones
y caían únicamente a la tierra del pavimento
para que nadie supiera a qué cultivo
se podría aplicar su indiferencia...

Y tal vez no le gustabas porque te negabas
a ayudarle a perder la jauría que acosaba
hambrienta de la luz que perdieron
en su adoración de los espejismos
que le guardaras detrás del pedernal de tu rostro
que le guarecieses de la intemperie de buena voluntad
debajo del mandil oficiante
de reina de todos los noes
y sazonadora de todas las insipideses
cuando te pedía que le acompañases un trecho
y mantenías el puesto
"estoy atareada atendiendo los cientos
de palomas mensajeras confundidas
presurosas de saber  las nuevas o decretos
que traen entre las patas de competidores
ignótos en un certamen del gatuperio"
¿es que todo el imperio cesante era tuyo?

                         * * *
Si te acosa una fotografía,
un gesto lloviznado con estampa de mujer
un café tibio entre las manos
auscultando los profundos meandros de la tarde
sus pases mágicos, sus pases de malevo
entre tangueros compases
por pasajes sórdidos dónde el tiempo juega
niño a esconderle la madeja al feroz recuerdo
para que no desate los nudos del hechizo
y se vuelva serio
si te asedia un pantallazo de todos
que se actualiza en Facebook desde cualquier lugar
hasta México
dónde burlones y discretos se denuncian
los estertores de una Camelia
que se mustia de orgullo y de silencio
-no hablan las camelias pero mudas saben balbucear
Algunos vocablejos: Flor, deseo, aire envenenado
Pero no saben modular diálogo, intercambio
Si acaso ofrecer el tallo a vientos violentos
y abrir la corola cabeza a probóscides olorosas a gasoil-
si con Moctezuma bailas acordes de murciélago
en toque de Rock-and-roll sacándote el corazón
desde el fondo del futuro…
ten por cierto
que no vale  la pena creer que el mundo está despierto
y que espera vivir el próximo instante
apegado a sus convencimientos
si te acosa un cierto aire con olor a muerte
no te afanes, ya estás muerto.